Duras declaraciones realizó en las últimas horas el jefe de la Policía de Tucumán, comisario Joaquín Girvau, luego de visitar a un uniformado internado en el Hospital Padilla, quien en horas de la noche del lunes resultó herido tras abatir a un presunto delincuente en Villa Amalia, en la capital tucumana.
“No les vamos a permitir que nos ganen la calle, que nos ganen en un operativo, el delincuente que se enfrenta a un policía debe terminar muerto, debe terminar muerto, porque así debe ser. Porque ellos no piensan si el policía tiene o no familia, y nosotros tampoco tenemos que pensar en eso”, manifestó Girvau, al programa Los Primeros, sobre el enfrentamiento mantenido entre el agente policial y un grupo de supuestos motochorros, hecho que todavía es materia de investigación.
Por tercera vez en menos de un mes, el titular de las fuerzas policiales ratificó su postura de guerra sin cuartel al delito, con muerte al delincuente como posible desenlace de ser necesario. “Hay que decir las cosas como son, nacieron delincuentes, morirán delincuentes; esto es así”, sostuvo el comisario en más de una ocasión en referencia a personas en conflicto con la ley.
En medio de la seguidilla de polémicas declaraciones, Tucumán registró un fin de mes sangriento con cinco muertes y otros hechos de sangre que tuvieron, en su mayoría, a policías como protagonistas principales.
En este sentido, Girvau insistió con la “mano dura”. “Hay que ser firme a la hora de actuar y no hacerles pasar una, salen con armas de fuego a matar, la Policía debe responder con dureza a esto”, sentenció y agregó: “la Policía de Tucumán estará en condiciones de parar la delincuencia cuando seamos decididos y firmes a la hora de actuar, porque ese es el mensaje que baja el gobernador, el ministro, el jefe y subjefe de Policía”.
0 Comentarios