El gobernador, Osvaldo Jaldo, entregó a las 93 comunas rurales y centros asistenciales del interior nuevos humidificadores, es decir, pulverizadores para la tarea de fumigación contra el mosquito transmisor del dengue. Además, se adquirió dos ambulancias, 11 desfibriladores automáticos, ocho bicicletas para agentes sanitarios, un móvil utilitario y 93 bidones de citronela.
"Hoy quiero expresar mi agradecimiento a todos y todas quienes están colaborando, tanto directa como indirectamente, en la lucha contra el flagelo del dengue en Tucumán", afirmó Jaldo.
Y prosiguió: "En las provincias del norte, como la nuestra, estamos acostumbrados a enfrentar esta enfermedad, a veces con mayor intensidad y otras con menos, con diferentes tipos de mosquitos. Sin embargo, en la actualidad, esta es una de las epidemias más grandes que enfrenta la República Argentina y países vecinos como Bolivia, Paraguay y Uruguay".
Asimismo, Jaldo dijo que "las entregas de equipamiento que realizamos hoy tienen un objetivo claro: salvar vidas en Tucumán. Debemos redoblar nuestros esfuerzos en todas las actividades, desde las comunas más pequeñas hasta los municipios más importantes. Nadie puede quedarse de brazos cruzados frente a esta epidemia. Todos debemos contribuir"
"Es fundamental que tomemos conciencia de la magnitud de esta situación. El trabajo para combatir el dengue debe ser más profundo, permanente y constante más que nunca". "En el Salón Blanco, ayer he tenido la oportunidad de agradecer el esfuerzo, desde los comisionados hasta los legisladores, funcionarios y el equipo de gobierno provincial, que trabajan sin distinción política para preservar la salud".
Por último, Jaldo enfatizó que "la salud y la vida de los tucumanos no pueden esperar. Por eso, dejemos de lado otras tareas y enfoquémonos en combatir el dengue".
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