La puja entre radicales y alfaristas suma intensidad. En particular, luego de que el legislador Alfredo Toscano (Partido por la Justicia Social) dijera que el diputado Mariano Campero (Unión Cívica Radical) “fundió” la Municipalidad de Yerba Buena tras su gestión de ocho años.
“Quiero hablar del ‘Bebito Fiu Fiu’”, ironizó el actual intendente de esa ciudad Pablo Macchiarola. “En primer lugar, quiero decir que Campero me ha dejado una municipalidad impecable, totalmente ordenada y saneada. El ladrón cree que son todos de su condición, y como Alfaro dejó reventada su municipalidad, el ‘Bebito Fiu Fiu’ cree que acá sucedió lo mismo, pero es todo lo contrario”, arremetió el jefe municipal radical.
El ex secretario de Obras Públicas capitalino durante la gestión de Germán Alfaro había cuestionado al diputado Campero. “(A la Municipalidad) la fundió Mariano Campero, que después firmó que no va a denunciar a la Provincia a cambio de que pueda pagar sueldos y hacer obras. Eso es Mariano Campero”, había dicho Toscano, a modo de respuesta porque el diputado había sugerido que el alfarismo respondía al gobernador Osvaldo Jaldo.
Macchiarola se subió a esa pelea. “Las viudas de José Alperovich reencarnaron en porristas de Jaldo. Germán Alfaro y el visitador serial de las playas de Miami deberían dar cuenta de los más de $ 4.000 millones que aparece que han desviado a través del Consorcio Metropolitano”, arremetió.
Según el intendente yerbabuenense, el alfarismo busca acercarse a Jaldo para obtener “amparo político e impunidad” “porque van a tener que dar explicaciones en la Justicia por el desvío del fondo a través del Girsu”.
“Una tercera cosa que quiero decir es que nuestro espacio político debería preguntarse de la conveniencia de incorporar actores que militaron toda su carrera en el peronismo. Se está extinguiendo el Partido por la Justicia Social. Además, otra cosa, los vecinos de San Miguel de Tucumán le dijeron a la esposa de Germán Alfaro que no. ¿Por qué? Porque evidentemente su gestión fue mala. Y los vecinos de la provincia de Tucumán le dijeron que no a Germán Alfaro justamente por sus malas gestiones. Y Mariano Campero lo derrotó en la urna”, apuntó. Y Cerró: “Viéndose derrotado en la de intendente y en la de diputado, ahora busca amparo en el calor oficial del Gobierno”.
En una línea similar se pronunció el legislador Manuel Courel, ex funcionario de Campero en Yerba Buena. “La verdad es que Yerba Buena es uno de los municipios más austeros, más transparentes y más honestos de Tucumán en la forma en que lleva adelante su gobierno. Creo que ni Toscano ni Alfaro pueden decir lo mismo, tienen incluso causas en la Justicia”, disparó.
“Alfaro y sobre todo Toscano vienen de raíz peronista y siempre estuvieron cerca del oficialismo. Fueron parte del gobierno de Alperovich, simpatizaron con Massa en su momento y estuvieron en la línea de Rodríguez Larreta, siempre buscando el calor de poder. Ahora parece que estuvieran buscando impunidad a raíz de las causas que tienen”, dijo Courel.
Completó sus críticas con un pedido para que se investigue la administración alfarista del Consorcio Metropolitano: “Está muy sucio y lo administró muy mal San Miguel de Tucumán. No se hacían licitaciones, se fue renovando siempre el mismo prestador por contratación directa, y después saltó esto. Nunca se supo el costo real del servicio”.
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