Darío Monteros, ministro del Interior de la Provincia, destacó la decisión del mandatario tucumano que “priorizó” el bienestar de los tucumanos por sobre cuestiones partidarias e ideológicas. “El Gobernador tomó la decisión política en lo institucional en este megaproyecto y en función de estar en peligro las principales actividades regionales, inició una negociación para que esas actividades en riesgo queden a salvo. Se acompañó el dictamen de las condiciones comprometidas para que este proyecto sea tratado”, comenzó explicando el exintendente de Banda del Río Salí.
Luego, aclaró que la firma del diputado Agustín Fernández “no definió el proyecto, salió por 11 votos de diferencia, esto ya estaba definido”. “Algunos hacen creer que el voto de Fernández fue determinante, para nada”.
“Nosotros minimizamos las críticas de un sector que no tiene responsabilidades institucionales, que solo busca defender sus intereses. Ese sector que no trabajo para Massa presidente, tampoco trabajo para el compañero Scioli en 2019 donde perdimos por un punto, un sector que solo tiene ego para ello. No nos preocupa. No son momentos de dirimir cuestiones, no es un problema ideológico, ni partidario, se tiene que priorizar el bienestar de la provincia en las economías regionales y la cuestión fiscal, por las cuales el gobernador está muy preocupado”, agregó al ser consultado por los cuestionamientos recibidos.
El fin de semana que pasó, la prensa nacional deslizó la posibilidad de que ante el recorte del paquete fiscal de la Ley Bases, el ajuste recaería a las provincias con el fin de las Transferencias discrecionales. “La provincia recibe el goteo natural que indica la coparticipación nacional. Había provincias que tenían algunos acuerdos de fondos adicionales, que Tucumán los tenía con el gobernador Manzur y que dejamos de percibir cuando comenzó la etapa de Osvaldo Jaldo. El gobernador cerró los números con lo que recibe de la coparticipación. Si viene lo adicional, se verá para qué se usa”, señaló Monteros.
Por último, el ministro del Interior dio detalles del nuevo Acuerdo Fiscal Municipal, al que se sumaron la mayoría de los municipios tucumanos, a excepción de Concepción y Burruyacú: “Todos se sumaron menos Concepción y Burruyacu. Burruyacu no viene siendo parte de este sistema, se va a autofinanciar con los recursos naturales que le corresponda y si lo requiere en algún momento, la Provincia lo va a acompañar”.
A continuación, Monteros explicó la situación de la Perla del Sur. “El intendente Alejandro Molinuevo estuvo reunido conmigo personalmente, hablamos muy claro sobre este nuevo acuerdo, estuvieron de acuerdo, salieron ese jueves y el viernes cambió de actitud y politizó esta situación. El solo hecho de que a un municipio se le garantice los sueldos y el pago de su funcionamiento para garantizar servicios básicos, creo que es importante. Molinuevo no lo vio así y tomó la determinación de afrontar las obligaciones de su municipio”, afirmó.
Y cerró recordando que Concepción “le debe entre 340 y 350 millones de pesos a la Provincia, que el gobernador decidió descontarle en 12 meses”. “Ellos tomaron esa determinación y el gobierno estará atento a ver si a fin de mes puede juntar sus recursos y pagar sus obligaciones”, finalizó.
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