Tafí Viejo: Noguera afirma "no perseguir militantes" tras una detención por pintadas agraviantes

Las consecuencias del divorcio político entre el gobernador Juan Manzur y el vicegobernador, Osvaldo Jaldo, hace tres meses se manifiestan con diversos matices e intensidad, a lo largo y a lo ancho del mapa territorial. Y desde hace algunas jornadas el clima se tornó tormentoso en Tafí Viejo, distrito que tiene en veredas enfrentadas al intendente, Javier Noguera, afín a Casa de Gobierno, y un Concejo Deliberante de mayoría cercana a la Legislatura.

Distintos dirigentes del peronismo aseguraron que en la “Ciudad del Limón” el ambiente se fue tornando ríspido paulatinamente desde marzo. Sin embargo, hay dos episodios que incrementaron estas tensiones en las últimas horas. Por un lado, un reclamo de ediles jaldistas y de la oposición -solicitada de por medio, con nueve firmas- para que el jefe municipal rinda cuentas de los usos que le viene dando a los fondos públicos; y por el otro, la polémica que se desató en la noche del lunes por una pintada política en la vía pública que terminó con la aprehensión de un militante afín al jaldismo.

De acuerdo con el parte policial, el militante fue sorprendido haciendo “pintadas agraviantes” -en Perú y Mitre- en contra del intendente el lunes a las 23 (horario de inicio de restricción de circulación nocturna, según la resolución vigente del COE). Fue detenido por efectivos de la comisaría local y de la Guardia Urbana del municipio por la contravención de “desorden en la vía pública”, según se asentó. En la comisaría se lo identificó como Flavio Gonzalo Bustos (37 años), integrante de la Agrupación 17 de Octubre que encabezan el prosecretario de la Legislatura, Alejandro Martínez, y su hijo homónimo, edil de la ciudad.

Dirigentes del peronismo aseguraron que en Tafí Viejo se desató una pelea por las pintadas políticas. Sostienen que grupos de ambos bandos se encargan de pintar paredes en favor de Jaldo o de Manzur, pero que también hay quienes “intervienen” los murales y marcan agravios junto a los apellidos o directamente blanquean paredes marcadas por los otros. En el jaldismo afirman que casi no tienen margen de maniobra porque la Guardia Urbana los monitorea de cerca.

Consultado por este diario, Noguera rechazó que se trate de una persecución política. “No persigo militantes políticos opositores, menos los hago detener”, expresó escuetamente. A su vez, dijo que sabe que el detenido trabaja en la Legislatura y que pintaba en contra suya y del gobernador Manzur.

El concejal Alejandro Martínez (h) rechazó los dichos del jefe municipal. “Nada pasa por casualidad”, dijo. Consideró que existe una persecución política y se despegó de todo tipo de vinculación con los agravios denunciados. “La discusión entre el gobernador y el vicegobernador es de otro ámbito. Tafí Viejo tiene sus problemas y el intendente tiene que dedicarse a esos problemas, no a los de otras jurisdicciones”, expresó a este diario.

Martínez (h) indicó que hoy por la tarde sesionará el Concejo Deliberante. Señaló que en el recinto repudiarán lo sucedido por las pintadas e insistirán con el pedido para que Noguera rinda cuentas sobre el uso de los fondos públicos desde el inicio de su gestión.

En cuanto a Bustos, el edil lo calificó como “un amigo y compañero”, dijo que su familia integra la agrupación hace décadas y reconoció que es empleado de la Cámara. “Él siempre trabajó con nosotros, en distintos lugares. Hoy presta servicio en la Legislatura y en todo lo que sea colaboración al equipo político”, señaló. (La Gaceta)